Más de un centenar de contagios en una residencia de mayores de Gondomar, en Pontevedra
El brote afecta a 89 usuarios y 16 trabajadores del centro de ancianos Vila do Conde, con capacidad para 119 personas
El 90% de los internos se encuentran asintomáticos y el personal de la residencia los está tratando con sus propios medios
Contagio masivo en otra residencia de ancianos de Galicia. En este caso se trata del centro de mayores Vila do Conde, ubicado en el municipio de Gondomar (Pontevedra). Allí se han detectado más de un centenar de contagios. Concretamente, 105. 89 de los afectados serían usuarios del centro. Los restantes, 16, trabajadores
Desde la dirección de la residencia explican a NIUS que no tienen claro cuál es el origen del brote. Todas las alarmas saltaron el pasado 20 de noviembre, después de conocer que uno de sus trabajadores había dado positivo en coronavirus. El día anterior habían realizado un pooling de saliva a todo el personalpooling. Una prueba que realizan cada quince días.
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Ese positivo activó el protocolo y, el mismo día que se supo del contagio, los sanitarios del centro sometieron a pruebas PCR a todos los internos. En ese primer cribado saltaron 25 positivos. Sin embargo, esta semana los test se repitieron y el número ha ascendido a 105.
Esta residencia tiene capacidad para 119 usuarios. Con lo cual, el 74% de los internos están contagiados.
El 90% están asintomáticos
La gran mayoría de los enfermos están respondiendo bien a la enfermedad. Explican desde el centro que el 90% de los ancianos no han desarrollado síntomas. Por el momento, solo han tenido que derivar un interno al hospital Povisa de Vigo. Fue este miércoles, al empeorar su estado de salud.
Los residentes están sectorizados, es decir, los positivos están aislados del resto. El personal del centro, en coordinación con las autoridades sanitarias, está haciendo frente a la situación con sus propios medios. Los empleados que estaban de vacaciones se han reincorporado de manera voluntaria para suplir a los compañeros que están de baja.
Este centro de mayores había esquivado con éxito la primera ola. Ahora, a pesar de los exhaustivos controles y las restricciones en las visitas familiares, no han podido hacer nada para evitar que el virus se extienda entre los residentes.