Los peligros de escarmentar a los 'aprovechados' de la vacuna dejándoles sin segunda dosis


Ximo Puig, presidente de la Generalitat Valenciana, ha anunciado que dejará sin segunda dosis de la vacuna a quienes se han puesto la primera sin ser prioritarios
Si no reciben la segunda dosis de la vacuna, su protección no es completa: pueden infectarse y contagiar a los demás
Pueden suponer, además, un riesgo para la salud pública: si se infectan, pueden propiciar mutaciones del virus
Un escarmiento en toda regla. Es lo que pretende hacer el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, con todas esas personas que se saltaron las normas y se han vacunado ahora sin que les tocara. “Ninguna persona que haya recibido la vacuna de una forma improcedente debe recibir la segunda dosis”, anunciaba este jueves. Dejarles sin la segunda dosis puede ser una buena reprimenda, pero, desde el punto de vista de la salud pública, conlleva unos riesgos, tanto de cara al propio vacunado como de cara a toda la sociedad.
Porque, además, no hablamos de una o dos personas, sino de unas 150, según sus propias estimaciones. Entre esos vacunados no sólo hay alcaldes, concejales o diputados, también personas de todo tipo y colectivos. La decisión de Puig de no ponerles la segunda dosis implica tirar a la basura esas 150 primeras que ya se les han inoculado, porque la protección completa se consigue tras las dos dosis. Pero no sólo eso. La decisión es peligrosa por dos motivos.
Caldo de cultivo para posibles mutaciones del virus
Por un lado, existe la posibilidad de que estas personas vacunadas con la primera dosis, si se infectan después, se puedan convertir en caldo de cultivo para que el virus mute en su organismo. Es algo de lo que llevan advirtiendo varios científicos desde que empezó la vacunación: poner sólo la primera dosis de la vacuna, o retrasar demasiado la segunda, puede potenciar la aparición de variantes del virus más potentes. ¿Por qué?
Lo explicaba, al hablar sobre el origen de las variantes del virus, el virólogo José Antonio López Guerrero. “Porque cuando te ponen la primera dosis, tu sistema inmune no está tan robusto todavía como lo estará con la segunda. Tu respuesta aún no es muy potente, y tiene lógica pensar que el virus aprenda a escapar de esa respuesta”. Si te infecta, aprende a escapar y muta para conseguirlo, el contagio haría el resto. Por eso hay quienes plantean la hipótesis de que, en ese tiempo intermedio entre las dos dosis, “si mucha gente se infectara tras la primera, se puedan generar variantes más resistentes”.
No quedarían protegidos: riesgo de infección y de contagio
Por otro lado, el mero hecho de que se puedan volver a infectar conlleva riesgos para su salud y para la de los demás. Porque lo que sí está claro es que no quedan suficientemente protegidos tras la primera dosis. Los científicos han alertado de ello en varias ocasiones.
El organismo necesita un tiempo para reaccionar tras recibir la vacuna. El efecto no es inmediato, y los anticuerpos que produce el sistema inmune no son los mismos después de la primera dosis que después de la segunda. Lo explicaba el inmunólogo Alfredo Corell, tras conocer la propuesta belga de inocular sólo una dosis pero a más gente, ante la escasez de vacunas. Corell explica que “el primer anticuerpo que se produce es la IgM, el de la fase aguda, entre 7 y 14 días después de la vacuna. Y si hay una segunda inmunización, se produce lo que se llama seroconversión, el organismo cambia de anticuerpo y se produce la IgG, que es la deseable".
Sólo con la primera dosis, en algunos casos no se va a generar ése anticuerpo, la IgG, que es el más eficaz para protegernos frente al virus a largo plazo. “No podemos decirlo en todos los casos, pero lo más probable es que en la inmensa mayoría, la IgG se produzca con la segunda dosis de la vacuna”, asegura Corell. El hecho es que el cuerpo necesita un tiempo para producir una buena respuesta frente al virus, y en esta vacuna, la propia farmacéutica lo ha estimado en al menos un mes siempre que haya dos dosis. Pfizer asegura que la protección es completa a partir de los 7 días de recibir la segunda dosis.
Con esta vacuna ha de pasar un tiempo entre la primera y la segunda dosis. El plazo estipulado por la farmacéutica son 21 días. La EMA da de margen, y como límite, 42. Ximo Puig está hablando, directamente, de dejarles sin recibirla. Una decisión que este viernes matizaba la vicepresidenta del gobierno valenciano. Mónica Oltra ha explicado que "será Salud Pública la que decida, teniendo en cuenta parámetros médicos”.