El Polígono Sur, el barrio más pobre de España, al borde del confinamiento: "No cumplen el aislamiento"


La tasa de incidencia acumulada en el barrio cuadruplica la de la ciudad de Sevilla
La principal causa de la propagación del virus es que los positivos no hacen un correcto aislamiento
Si en 15 días, la situación no mejora, se plantean volver a la fase 1 de la desescalada
El Polígono Sur de Sevilla, el barrio más pobre de España, está al borde del confinamiento. La propagación del coronavirus en esta zona ha hecho saltar todas las alarmas. Las cifras hablan por si solas. La incidencia, acumulada en los últimos 14 días, cuadruplica ya la media de la ciudad. Una situación “preocupante”, como señala a NIUS Jaime Bretón, comisionado del Polígono Sur.
Se trata de una transmisión comunitaria que afecta a, prácticamente, todos los barrios que lo conforman, entre ellos el conocido como las Tres Mil Viviendas. “No hay un foco localizado en dos o tres zonas, sino que hay transmisión en todo el barrio”, nos explica. De esta forma, si en Sevilla capital la tasa de contagios es de 80 casos por cada 100.000 habitantes; en esta zona de la ciudad, el número asciende a 344 por cada 100.000. Son datos puestos sobre la mesa en la reunión que, este lunes, mantenía el Comisionado con la Junta de Andalucía y el ayuntamiento.
De las 226 pruebas PCR que se han realizado en los últimos días, 97 son positivas. De ellas, trece personas permanecen hospitalizadas; dos, graves; y hay un fallecido. El perfil de los contagiados es joven. La edad media está en 35 años, abarcando una franja entre los 25 y los 45. Si en quince días, plazo marcado por las administraciones, estas cifras no mejoran se plantean volver a la fase 1 de la desescalada. “Es una medida que está sobre la mesa”, nos confirma Bretón.
Aislamiento incorrecto: “Siguen compartiendo cama, baño y comida”
Uno de los grandes problemas que impide frenar la expansión del virus en esta zona es que no se hace un correcto aislamiento. Quienes dan positivo se aíslan en casa, pero no de su unidad familiar. “Siguen conviviendo con las mismas personas, compartiendo cama, baño y comida”, lamenta Bretón. De forma, que al final, todo el núcleo familiar termina contagiado.
Una situación que se agudiza con el concepto de familia que se tiene en esta zona. Los llamados 'clanes' y que hace aún mas difícil controlar la transmisión. “En un piso pueden llegar a convivir hasta doce personas, ¿cómo aislar una habitación?”, se pregunta el comisionado.
A ello, se suma otra problemática, el de los muchos habitantes del Polígono Sur que se ganan la vida en la calle y que, a pesar de haber dado positivo, siguen con su actividad económica sin guardar cuarentena. Para ello, señala el comisionado, se ha pedido ayuda a los Servicios Sociales para que les suministren la garantía alimentaría que necesiten y evitar que incumplan el aislamiento.
Evitar concentraciones en cultos religiosos, bodas o celebraciones
“Aquí, hay una boda y va todo el barrio”. Un ejemplo que pone Bretón y que sirve para hacernos idea de la idiosincrasia de esta comunidad. Por eso, se quiere evitar al máximo cualquier concentración de personas en cultos religiosos, celebraciones o mercadillos. “El objetivo es reducir al máximo la movilidad dentro del barrio”, señala el comisionado.
Para ello, desde el comisionado han mantenido contacto con los responsables de las tres parroquia católicas y con un líder de la iglesia evangélica para concienciar sobre la realidad y que se tomen medidas.
La vuelta al cole pende de un hilo
El polígono sur cuenta con dieciséis centros educativos (ocho colegios, cuatro institutos, tres guarderías y un centro de mayores). En plena expansión del virus, la vuelta a las aulas pende de un hilo. Tanto que hasta barajan la opción de posponer el inicio de las clases quince días para intentar que la situación mejore, nos cuenta Bretón.
También se plantean otras medidas alternativas como la opción de retrasar solo el inicio en los centros donde la incidencia es mayor o bien, restringir el acceso de aquellos alumnos procedentes de familias que han dado positivo.
Situaciones de violencia a consecuencia de los contagios
Rafael Pertegal, presidente de la Asociación de Vecinos Martínez Montañés, asegura que la situación es grave y que está generando situaciones muy tensas. "Hay vecinos que han dado positivo y no cumplen ninguna medida sanitaria. Salen a la calle, entran en comercios sin mascarilla y la están liando", lamenta.
La consecuencia, episodios de violencia contra aquellos que reconocen estar contagiados. "A un vecino le destrozaron el coche y lo amenazaron", nos cuenta. Y personas que por miedo a represalias no dicen que son positivos en coronavirus.
Una situación extrema para la que el líder vecinal pide ayuda urgente. "No podemos esperar quince días o esto irá a peor", se lamenta.