El porqué de la proliferación de ratas, cucarachas y mosquitos durante el confinamiento


La Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (ANECPLA) alerta de este aumento de plagas invasoras
Sin la presencia humana y ante la escasez de desperdicios, algunas especies han salido de su hábitat natural
Las normas de distanciamiento social no se han aplicado a las plagas de roedores, mosquitos, cucarachas y otras especies invasoras, que lejos de confinarse, han proliferado con más fuerza esta primavera. ¿El motivo? Un cambio en nuestros hábitos sociales. La escasez de alimento y desperdicios donde antes sí los había ha provocado que se vean obligados a buscar nuevas fuentes de comida y, por tanto, se desplacen hacia el exterior en zonas que antes no eran habituales.
La Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (ANECPLA) alerta de este aumento. “No es una consecuencia directa del virus, sino de los cambios sociales que las personas hemos tenido que hacer, sumado a las condiciones meteorológicas”, cuenta a NIUS Milagros Fernández, directora general de ANECPLA. Son muchos, dice, los avistamientos de ratas y cucarachas que se están produciendo. “Con restaurantes, tiendas y hoteles sin actividad y, por tanto, sin desperdicios a través de los sumideros, han tenido que salir de su hábitat natural”, señala Fernández.
Esta menor accesibilidad a la comida implica, incluso, que los roedores puedan mostrar un “comportamiento poco común o agresivo. No tanto hacia los humanos como hacia otras ratas y ratones o incluso hacia determinadas propiedades, buscando grietas para poder entrar y encontrar comida”, añade Sergio Monge, presidente de ANECPLA.
Estos molestos huéspedes se han encontrado, además, como consecuencia del confinamiento, con edificios, locales y negocios sin rastro de humanos, en los que han podido campar a sus anchas. Javier Cruz, director técnico de Dexan, una empresa sevillana de control de plagas, confirma a NIUS el aumento de trabajo. “Estamos hasta arriba, recibiendo avisos constantemente”, nos cuenta mientras acompaña al propietario de un bar a su local. Tras meses cerrado, se lo ha encontrado invadido por una plaga de cucarachas. “En condiciones normales, con el bar abierto, viven en sus guaridas, pero con el confinamiento han tenido la libertad de salir”, señala este experto.
Mosquito tigre: una amenaza creciente
Las frecuentes lluvias y las altas temperaturas que están caracterizando esta primavera son el cóctel perfecto para la proliferación de mosquitos, especialmente el conocido como 'Tigre', que será especialmente intensa en la zona del Levante español.
A ello, se suma que muchas segundas residencias permanecen cerradas y sin mantenimiento, por el estado de alarma. “Sus dueños no han podido ir todavía y las lluvias han llenado, por ejemplo, bebederos de animales domésticos, macetas o juguetes que hayan podido quedar en los jardines. Todos, lugares excepcionales para que la hembra del mosquito tigre deposite sus huevos”, explica la directora General de ANECPLA.
Las ratas: "muy cómodas" sin la presencia humana
Otra de las plagas que ha proliferado, según ANECPLA, es la de las ratas. Están relacionadas con todo tipo de gérmenes y parásitos y con más de cincuenta patógenos diferentes. En general, es una especie que esquiva la presencia humana, por lo que “se ha encontrado muy cómoda”, durante nuestro confinamiento. “Han salido al exterior y se han encontrado que no hay ruidos, ni coches, ni personas”, afirma Fenández.
Cuidado con las garrapatas en los paseos por zonas naturales
En este caso, las lluvias han dado lugar a un importante crecimiento de la vegetación que, unido a las altas temperaturas, “es el caldo de cultivo perfecto para la proliferación de las garrapatas”, explica la directora general de ANECPLA, que recuerda que son un tipo de artrópodos transmisores de un buen número de enfermedades.
Por eso, ante el aumento de paseos por zonas naturales, por parte de la población durante la desescalada, recomiendan extremar las medidas de prevención para evitar el contacto con esta especie que se esconde en la hierba. “Utilizar pantalón largo, caminar evitando zonas de vegetación y revisar a las mascotas”, señala Fernández.