Servicios Sociales vigilaba desde hace meses a la familia del bebé fallecido tras la rotura de un brazo

Los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Almassora (Castellón) activaron el pasado mes de marzo un plan de intervención durante seis meses para realizar un seguimiento a la familia del bebé cuyo padre ha ingresado en prisión tras presuntamente herirle de gravedad y provocarle la muerte.

Según han explicado fuentes del consistorio, este plan de intervención se activó con el fin de garantizar que el bebé tuviera un entorno seguro después de que en el mes de febrero el menor fuese atendido en el Hospital General por una fractura en un brazo y el centro avisase de tal circunstancia a los Servicios Sociales.

En dicho plan, que recibió el visto bueno de la Conselleria, participaban los padres del bebé, así como los abuelos maternos y paternos e, incluso, incluía que la abuela paterna se hacía cargo de vigilar las conductas de los padres respecto a la atención del bebé.

Desde que comenzó el seguimiento, la familia recibió 15 visitas por parte de los Servicios Sociales y varias llamadas, también durante el periodo de confinamiento. La última visita se produjo el jueves de la semana pasada, tras la que Servicios Sociales certificó que el bebé estaba bien nutrido y la vivienda estaba limpia.

Desde el consistorio han indicado que en ningún momento se detectó ningún indicio de que el bebé no estaba bien atendido. El Ayuntamiento remitió el pasado lunes todos los informes realizados durante el seguimiento a la Guardia Civil y a la Conselleria después de que los padres del bebé lo trasladasen a un centro de salud por diversas lesiones y desde allí lo enviaran al Hospital General, donde finalmente ha fallecido.

La titular del Juzgado de Instrucción 5 de Castellon, en funciones de guardia, acordó este lunes el ingreso en prisión provisional del padre del bebé, detenido por agredir al niño de 10 meses, mientras que la madre, menor de edad, ha ingresado en un centro de menores por estos mismos hechos.

La alcaldesa de Almassora, Merche Galí, decretó este martes tres días de luto por la muerte del bebé y este miércoles se ha celebrado un minuto de silencio para condenar los hechos en la puerta del consistorio, donde las banderas ondean a media asta.

La primera edil ha señalado que es un día "muy triste" y de "conmoción" para toda la población de Almassora y para toda la familia. "Para los Servicios Sociales ha sido un duro golpe", ha añadido.

Galí ha explicado que, además del seguimiento "continuo" que se realizaba a la familia del bebé por parte de los trabajadores sociales y en diversas horas del día, "en el que no se había detectado ninguna anomalía que hiciera sospechar que pudiera ocurrir este suceso", se había incluido en programas municipales de reinserción a los progenitores del menor para encontrarles trabajo, y "nada hacía pensar que pudiera tener este final".

Así mismo, ha señalado que el Ayuntamiento está colaborando con la Justicia y hoy mismo desde Servicios Sociales se ha remitido documentación requerida por la Fiscalía. Preguntada si el Ayuntamiento ha valorado la posibilidad de presentarse como acusación particular, la alcaldesa ha apuntado que tendrán que sopesar a partir de ahora la participación del consistorio en este proceso.