Los cuatro detenidos por vejar a un discapacitado en Huelva tienen antecedentes por amenazas, lesiones y violencia machista


La víctima sufrió un cuadro clínico con convulsiones debido al estrés
Obligaron al hombre de 44 años a beber aceite lubricante, le arrojaron huevos, le rociaron con un extintor y le hicieron saltar al agua
Los arrestados viven en Punta Umbría y podrían ser condenados con una pena de entre seis meses y dos años de prisión por trato degradante
Cuatro jóvenes vejaban a un hombre de 44 años residente en Punta Umbría con una discapacidad del 66%. En un vídeo se puede ver a la víctima tumbada en el suelo del Puerto Pesquero mientras uno de los atacantes -que viste una chaqueta naranja- le agarra por debajo de las axilas mientras que otro -que lleva una sudadera amarilla- le sujeta por los tobillos y le arrastra contra su voluntad con intención de tirarlo al agua. El hombre se resiste y grita, probablemente debido al estado de estrés en el que se encontraba. Sufre lo que parece un cuadro clínico con convulsiones.
En otra secuencia se ve a la víctima sentada en el suelo, mientras uno de los agresores le arroja huevos por la espalda. Otro le rocía con un extintor mientras una cuarta persona se ríe a carcajadas y un quinto graba. El hombre se levanta de forma apresurada porque tenía problemas para respirar. En otro vídeo se le ve con la cara y la ropa totalmente impregnada de polvo del extintor. Le obligan a beber aceite lubricante de vehículos a pesar de que se ve que el afectado no desea ingerirlo voluntariamente. Finalmente le obligan a desnudarse y a quedarse solo con la ropa interior. Le piden que suba a un barco y se lance al agua.
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Las imágenes fueron difundidas el pasado sábado 19 de noviembre en Tik Tok. Destacan por su crudeza y gravedad. Algunos usuarios se lo remitieron a la Policía Local, que lo puso en conocimiento de la Guardia Civil. Así comenzó la operación Seizures, que permitió identificar y detener a los autores este lunes.
Se trata de Celestino Maestre de 22 años, Antonio Ortega de 26 años, Jonatan Silva de 28 y Rafael Jesús Riera de 30. Todos residen en Punta Umbría y cuentan con numerosos antecedentes por amenazas y lesiones. Alguno también por violencia de género hacia su pareja. En sus redes sociales difunden vídeos de fútbol, de bromas pesadas o incluso de gran violencia como el de un pedófilo al que rebeldes rusos dan latigazos hasta la muerte por violar supuestamente a una niña de dos años en el sur de Ucrania.
La víctima es una persona dependiente con un alto grado de minusvalía psíquica, por lo tanto una persona especialmente vulnerable a efectos penales. Los autores podrían ser condenados con una pena de entre seis meses y dos años de prisión por trato degradante.