Un cohete ruso envuelto en llamas atraviesa el cielo de A Coruña

Se especulaba con que podía ser un meteorito, pero finalmente se ha sabido que el haz de luz que se pudo ver en Galicia eran los restos de un proyectil
Partió el sábado 25 de abril desde Kazajistán rumbo a la Estación Espacial Internacional con comida, agua, combustible y aparatos para hacer experimentos
“Fue lanzado para llevar carga al espacio. Tras dejar allí la carga, el cohete se ha quedado suelto y ha caído”, comentan desde el Observatorio Astronómico de Santiago de Compostela
Borja se dirigía al trabajo. Eran las 06:45 horas de la mañana. Estaba conduciendo cuando, de repente, una bola de fuego en el cielo llamó su atención. Sorprendido por lo que estaba sucediendo, detuvo la marcha del coche y captó la increíble escena. “Puse los intermitentes, me eché a un lado de la carretera para no molestar y salí para grabarlo. Fue espectacular, temblaba de la emoción. Jamás pensé que pudiera ver algo así en directo”, comenta Borja Nuñel a NIUS.
Ocurrió en A Coruña y no solo lo vio Borja. Muchas personas contemplaron desde sus casas cómo un haz de luz atravesaba el cielo. Pensaron que podía ser un meteorito, rocas espaciales. Pero ahora se ha sabido que fue la reentrada en la atmósfera de un cohete ruso. Concretamente del Soyuz-2.1a. Es la conclusión a la que han llegado en el Observatorio Astronómico Ramón María Aller de Santiago de Compostela (A Coruña). “Fue lanzado para llevar carga al espacio. Tras dejar allí la carga, el cohete se ha quedado suelto y ha caído. Cada vez que se lanza un objeto al espacio, acaba cayendo a la tierra”, comenta José Ángel Docobo, el director de este observatorio.
De Kazajistán a la Estación Espacial Internacional y, de allí, a A Coruña
El cohete ruso fue lanzado el sábado 25 de abril desde el cosmódromo de Baikonur (Kazajistán) rumbo a la Estación Espacial Internacional (EEI). Se sabe que en tres horas y 20 minutos llegó a su destino y que llevaba en una nave acoplada más de dos toneladas de carga, incluyendo alimentos, medicamentos, agua, combustible y aparatos para realizar experimentos. Este martes, tres días después de su partida, el cohete se desintegraba en el cielo de A Coruña.
RT @NASASpaceflight: LAUNCH! Soyuz 2-1a launches with Progress MS-14 on a fast rendezvous resupply mission to the ISS.
— ruimtevaart (@ruimtevaart) April 25, 2020
Play by Play:https://t.co/Ux6JkExzts
Roscosmos launch clip: pic.twitter.com/bSfQfM8ahW
Quienes lo han podido contemplar se quedaron impresionados por su luz y, también, por el tiempo que pudieron observarlo. “Más de cuarenta segudos, seguro”, comenta Borja a NIUS. A Susana García, quien lo vio desde la ventana de su casa, le dio tiempo a avisar a su hijo y a despertar a su mardo. "Duró mucho y no se oía nada", comenta a NIUS. Precisamente ese detalle, el de su duración, ha permitido a los expertos sacar conclusiones rápidas. “Es una de las cosas que diferencia a un bólido de otro objeto. Un bólido es difícil que dure más de cinco segundos”, explica Docobo.
Dicen desde el Observatorio Astronómico de Santiago que no es algo extraño, aunque sí difícil de ver. “En septiembre de 2001 hubo un avistamiento similar en Galicia”, comenta Docobo. En el vídeo se puede ver cómo el cohete se va desintegrando conforme se acerca a la tierra. “En el trayecto, la atmósfera lo va destruyendo. Es raro que llegue al suelo”, comenta. En este caso, todo apunta a que no se ha producido un impacto. En caso de que se produjera, no habría sido peligroso ya que hubiera caído en el Océano Atlántico.