Diario de la desaparición de una excursionista en los Pirineos: la policía analiza sus últimas publicaciones


La Guardia Civil y la Gendarmería francesa buscan desde el pasado 25 de noviembre a la joven británica desaparecida en el Valle de Benasque (Pirineos)
Las fuertes tormentas de nieve han obligado a suspender su búsqueda y la familia se ha mostrado desolada por la ausencia de noticias
A través de sus redes sociales y de su blog, Dingley narraba su recorrido en solitario y manifesta que se "sentía segura en las montañas"
Días antes de su desaparición, Esther Dingley habló con su familia para contarles los preparativos del que iba a ser su último ascenso antes de reencontrarse con su pareja, Dan Colegate, en la localidad francesa de Arreau (Altos Pirineos). A la conversación con su familia le siguió una fotografía a su pareja en la que la joven británica, de 37 años, se mostraba sonriente tras coronar en solitario al Salvaguardia, un pico de 2.736 metros en el Valle de Benasque. Desde entonces, se desconoce su paradero y los equipos de rescate no descartan ninguna hipótesis.
Desde hace más de diez días, especialistas de los grupos de rescate e intervención en montaña de la Guardia Civil de Benasque, Boltaña, Huesca y Jaca, además de además de la Unidad Aérea de Huesca, así como la Gendarmería francesa han peinado la zona intensamente tratando de localizar a Esther Dingley. Sin embargo, el intenso temporal de nieve que azota los Pirineos desde este viernes ha obligado a suspender la búsqueda.
A kilómetros de distancia, su familia se muestra desolada. "Es un momento muy angustioso para todos. No tenemos idea de lo que le ha pasado", ha asegurado Elizabeth Wosley, tía de la desaparecida, en declaraciones al diario británico Daily Mail. "Tenía toda la ropa y el equipo adecuados y sabía a dónde iba", ha añadido su familia, después de mantener una última conversación antes del ascenso al Salvaguardia.

"El caracol está de nuevo en movimiento"
Dingley contaba con finalizar su escapada en solitario el pasado 25 de noviembre. Para entonces, esperaba reencontrarse con su pareja en Arreau. Después de realizar una ruta de senderismo circular entre España y Francia desde comienzos de noviembre, la joven no regresó a la localidad francesa y las alertas se dispararon. Al no tener noticias de ella, Dan comunicó los hechos a la gendarmería de Bagnères- de- Luchon.
“Estoy en el cielo.... El caracol está de nuevo en movimiento, y me encanta”, escribió en las redes sociales el pasado 21 de noviembre, justo un día antes de su ascenso. Precisamente, la actividad en redes sociales y en su blog, que ha mantenido con publicaciones durante su recorrido narrando los días, ha permitido a la Guardia Civil reconstruir sus pasos.
El 19 de noviembre firmó su última entrada en el blog, contando que había cruzado la frontera desde Francia a España y que había dudado si ir a otro refugio o bajar con otro excursionista, que había encontrado en el camino, hasta Benasque, donde estaba su caravana. Allí, los agentes han hallado el vehículo, pero ni rastro de la alpinista.
Antes de esa firma, la expedición la había llevado a pasar cuatro días en el Parque Nacional de Ordesa y también en la cima del Turbón. "Justo antes de los encierros franceses, crucé hacia España. Me siento más segura en las montañas y las tasas de incidencia son mucho más bajas. Casi no veo a nadie", comentaba en sus redes.

Ausencia de noticias
Su pareja ha agradecido, también en el tablón que compartían para publicar sus expediciones, los medios desplegados y ha reconocido que su inquietud aumenta "día tras día" por no tener noticias de Esther. "Ambos coordinadores de búsqueda me han dicho que, aunque nunca puedan estar cien por cien seguros, la opinión que prevalece es que ella no está allí", ha apuntado Dan, refiriéndose al pico Salvaguardia. "Si se hubiera caído la habrían encontrado dada la intensidad del rastreo y las características de la zona", ha añadido.
Sin pruebas, hasta el momento, que ayuden a dar con su paradero, la Guardia Civil no ha descartado ninguna hipótesis en la investigación. Si bien en un principio la principal tesis ha sido un accidente de montaña, a estas alturas no se excluyen otras posibilidades. Según ha publicado 'The Sun', la policía está utilizando expertos para examinar sus fotos de Instagram y desentrañar las 24 horas antes de su desaparición. Además, la prensa británica no descarta diferentes hipótesis como una caída accidental, el presunto secuestro a manos de otra persona o incluso el ataque de un oso.

¿Subió Esther dos veces al Salvaguardia en el mismo día?
Según el tabloide británico, la última fotografía que tomó Esther la muestra en la cima con un panel solar y un mástil de telecomunicaciones reflejado en sus gafas de sol. Una imagen diferente, según sostiene, que la publicada un día antes, en la que se la observa con una camiseta con el cuello abierto y una mochila a sus espaldas.
“La última foto se tomó más tarde en el día, ya que la sombra es más alta en la pendiente. Eso sugeriría que subió al Salvaguardia dos veces, lo que lleva a la pregunta, ¿por qué subir al mismo lugar dos veces en 24 horas?", recoge 'The Sun' en el reportaje publicado el pasado viernes.
Con todo ello, la investigación sigue abierta y los agentes rastrean las publicaciones para tratar de aportar luz a la búsqueda de Esther, que en los últimos años había atesorado su experiencia en alta montaña. Desde 2014, la pareja hacia su sueño realidad en una aventura que les había llevado a dejarlo todo y recorrer Francia, Suiza, Austria, Italia, Eslovenia y Liechtenstein. Todo después de que Dan hubiera atravesado graves problemas de salud tras una infección posquirúrgica.
Él y Esther, jefa de una empresa de formación, decidieron dar el paso y dejarlo todo atrás para cambiar una vida convencional por la natural y kilómetros de asfalto. Juntos habían pasado el confinamiento derivado de la primera ola de contagios por coronavirus. Ambos admitieron abiertamente haber sentido la tensión de vivir juntos en una camioneta durante meses. Ahora ella había decidido durante casi un mes arrancar una nueva aventura en solitario, mientras él esperaba en Francia, donde sigue aguardando noticias sobre su paradero.