La empresa que analiza los teléfonos del caso Marta del Castillo: "Tenemos esperanza en encontrarla"


"Los registros obtenidos de estos análisis permitirán a la Policía evaluar posibles ubicaciones y reconstruir los movimientos de los implicados", dice el director de Lazarus
"La tecnología permite acercarnos con una precisión de siete metros al móvil de los implicados", destaca Manuel Huertas
El usuario solo es consciente de lo frágil que es su reputación digital cuando tiene un problema con ella
Han pasado 12 años de la desaparición de Marta del Castillo. El 24 de enero de 2009 es el último día que vieron a la sevillana de 17 años con vida. Un caso muy complicado que tiene hasta siete versiones diferentes del propio asesino confeso Además, hay un acusado por encubrimiento pero el cuerpo de Marta sigue sin aparecer. Aunque es posible que se esté más cerca de descubrir la verdad.
Y sus padres no pierden la esperanza. Tras la emisión de la serie documental '¿Dónde está Marta?', que se emite en Netflix, se arrojan algunas dudas y errores en el caso. La serie revela que en ese momento no se tuvo en cuenta la geolocalización de los teléfonos móviles de los implicados en la muerte de Marta, muy importantes aquella noche. Ahora, el Juzgado de Instrucción número 4 de Sevilla ha dado luz verde a que se investigue y ha entregado a un perito judicial el teléfono de Miguel Carcaño.
Aquí es donde entra Lazarus, una empresa de recuperación de datos, ciberriesgo e informática forense que posee expertos y tecnología adecuada para rastrear dónde estaban esos dispositivos móviles la noche de la desaparición. NIUS ha hablado con su director, Manuel Huertas.
Pregunta. ¿Tras la serie documental de Marta del Castillo, se está esperando un análisis de los datos del teléfono móvil de los acusados?
Respuesta. Dentro de lo que se puede trasladar, ya que hay un asunto judicial implicado, en efecto, se esta trabajando con algunos dispositivos implicados en aquellos hechos para los que el tiempo transcurrido no es un factor determinante en lo que a los dispositivos se refiere, ya que estos quedaron incautados y desde entonces no se han utilizado, por lo que los registros están en el mismo estado que quedaron cuando se apagaron por última vez.
P. ¿Es posible que después de tanto tiempo se pueda realizar? ¿Cómo trabaja Lazarus ante esta investigación tan complicada?
R. Nuestra manera general de abordar retos como éste conlleva un análisis previo del escenario al que nos enfrentamos, una identificación muy exhaustiva de toda la tecnología implicada, desde software a hardware e incluso componentes separados que componen la tecnología analizada y qué circunstancias rodean la situación, de manera que diseñamos una estrategia de reproducción del escenario en el que se puedan afrontar con éxito los resultados que buscamos y poder garantizar que los resultados obtenidos son repetibles mediante los métodos aplicados, para que sobre el resultado no quede ninguna posibilidad de duda.
P. ¿En este caso hay que clonar los móviles de los implicados?
R. En realidad, no se trata de clonar los móviles. Si lo pensamos detenidamente, si tenemos problemas para acceder al contenido de un dispositivo y lo clonamos, pasamos de tener un problema a tener dos. En realidad, en lo que se está trabajando es en realizar una extracción del contenido a bajo nivel, es decir, incluyendo la información de los registros a nivel electrónico de toda la actividad del dispositivo, por lo que podríamos tener el histórico de todas las acciones, desde a qué hora se enciende o apaga, hasta en qué antenas se ha conectado, aunque no se hagan llamadas.
P. Aunque los teléfonos estén apagados, ¿se puede buscar el recorrido de los implicados por todas las antenas a través de los datos ocultos del teléfono?
R. En realidad no. Si el teléfono esta apagado, no interactúa con ninguna antena. Pero si esta encendido pasan dos cosas: que tenga línea, es decir, que hayamos introducido el pin de nuestra tarjeta, o bien que no. En ambos casos, el teléfono dispone de cobertura. Recordemos el aviso “solo llamadas de emergencia”. Cualquier teléfono conectado a la red tendría esta cobertura aunque no tenga tarjeta de ningún operador y, en cualquier caso, si además tiene cobertura dispondrá de registros aunque no se hayan efectuado llamadas o recibido mensajes.
P. ¿Esto podría permitir conocer el sitio donde se encuentra el cadáver de Marta del Castillo?
R. La idea es que los registros obtenidos de estos análisis permitan a la Policía evaluar posibles ubicaciones y reconstruir los movimientos de los implicados, de manera que se pueda facilitar encontrar a Marta y colaborar en finalizar con un capitulo bastante oscuro. La tecnología permite acercarnos con una precisión de entre siete y 30 metros al móvil de los implicados. Todo depende del entorno, de las antenas que haya cerca de donde estuvieron, de las zonas con más o menos cobertura... Lo que buscamos aquí son las incógnitas de horas que hay en los datos que ya se tenían. Rastreamos los móviles desde el día que se incautaron (ya no se han vuelto a tocar) hasta el día 24, día de la desaparición.
P. Estamos hablando de algo muy importante. ¿Cómo se siente colaborando en casos tan mediáticos y complicados?
R. Supongo que acabamos interviniendo en este tipo de casos por la reputación labrada durante años, que no puede construirse de otra manera que haciendo las cosas bien y concienzudamente, en definitiva, con profesionalidad, tanto en este como en muchos otros casos, especialmente en los que conseguimos resolver. Estamos muy orgullosos de poder contribuir y contar con un equipo de profesionales como los que tenemos, que sin el trabajo conjunto seria imposible afrontar este tipo de retos.
P. ¿Cuánto tiempo puede alargarse este proceso?
R. Pues estamos haciendo un esfuerzo muy grande para poder reducirlo al máximo, pero aún quedan algunas semanas de trabajo aunque estamos cerca.
P. ¿Es optimista con los resultados?
Nosotros somos optimistas por defecto, otra cosa es que filtremos el optimismo con realismo. Pero si no tuviéramos esperanza en poder sacar datos útiles, no se hubiera propuesto realizar estos análisis.
P. ¿Cómo ayudaron en el caso de Débora Fernández?
En este caso se ha intervenido recuperando la información del disco duro del ordenador personal de Débora, que estaba dañado porque se quemó. A partir de aquí, se ha tratado de reconstruir la información de los días cercanos a su desaparición y se sigue trabajando actualmente en este y algún otro equipo relacionado con su entorno.
P. ¿También colaboraron en el caso de Diana Quer?
R. En este caso, se ha colaborado en los métodos de desbloqueo del teléfono de Diana.
P. ¿Qué es Lazarus y que aporta al mundo de la investigación y ciberriesgo?
R. Lazarus nace en 2004 como un laboratorio de recuperación de datos, con la intención de democratizar servicios tecnológicos complejos con modelos de aproximación al mercado muy innovadores en los que se ha llegado a dar cobertura a casi 13 millones de clientes. A día de hoy seguimos aportando soluciones al mercado acordes al sector de la información digital, en el que se han ido añadiendo al laboratorio de recuperación de datos, servicios de seguridad de la información para protegerla, análisis informático forense para poder analizar lo sucedido y certificarlo, de manera que se puedan reconstruir los hechos.
P. Habéis colaborado con Policía y Guardia Civil en muchos casos ¿La mayoría con éxito no?
R. Desde el comienzo de nuestra historia, siempre se ha venido prestando servicio a Cuerpos de Seguridad del Estado de manera desinteresada, como una contribución a la sociedad, en la que haciendo uso de nuestras capacidades podemos aportar soluciones que faciliten la justicia de nuestro país. En la mayoría de los casos se ha podido ofrecer resultados a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en asuntos de todo tipo.
P. ¿El usuario es consciente de su reputación digital y de que puede perder el control sobre ella?
En general el usuario solo es consciente de lo frágil que es su reputación digital cuando tiene un problema con ella, pero casi nunca es consciente de que este riesgo es proporcional a la exposición a la que la somete y más peligroso es el nivel de desconocimiento sobre lo duraderos que son los efectos de un impacto en la reputación. Se puede perder muy deprisa y tardar años en repararse.
P. Ha impartido varios cursos sobre investigación tecnológica y evidencia digital en el INCIBE para jueces y fiscales españoles y latinoamericanos. ¿Qué les trasmite?
R. Sí, en efecto, la formación en este área ha ido incrementándose a lo largo del tiempo. La formación para que jueces y fiscales se familiaricen con este tipo de evidencias es muy importante, ya que como en este y otros muchos casos la tecnología es importantísima para resolver muchas cuestiones y hay que saber entenderla para poder utilizarla a favor de la justicia. Los escenarios tecnológicos involucrados en los entornos judiciales, vienen haciéndose cada vez mas complejos desde hace años y se va a seguir complicando los próximos años, con entornos cloud. Esta experiencia me ha permitido ver las diferencias jurídicas entre España y otros países, entendiendo las complicaciones que existen en otros países respecto a la prueba electrónica y que ayudan en otros cursos que venimos dando desde hace años en distintas universidades o para colegios de abogados, que cada vez necesitan mas conocimientos en esta materia.
P. ¿Cuál es caso más común de desconocimiento por parte de los usuarios ante el uso de su móvil?
R. Realmente es un desconocimiento que aplica a no solo al uso de teléfono móvil, sino al uso de la tecnología en general, del que el móvil es el dispositivo más personal de todos y que casi siempre esta con nosotros. El usuario en general desconoce la cantidad de acciones y registros que recogen los dispositivos sin conocimiento del usuario mediante los dispositivos y las aplicaciones que hay en ellos. El móvil esta permanentemente conectado y esta enviando y recibiendo información.
P. ¿Con qué deberíamos tener cuidado?
R. Principalmente con la información que publicamos, la que reenviamos y con quién y qué compartimos. Internet no perdona y lo que se suba es muy difícil de quitar. Si publicamos o dejamos información suficiente en Internet se pueden hacer perfiles muy precisos de todo lo que hacemos.