'MacLancha': lo que come el narco mientras espera para alijar en el Estrecho

"¡Oso, tráeme una fanta!". El mensaje, en uno de los teléfonos desechables que usan los narcos para comunicarse posiciones, lo lee un miembro de las fuerzas de seguridad, en una narcolancha recién capturada. Es el antojo de uno de los tripulantes, que se ha puesto en contacto con la infraestructura en tierra, para que le lleven, al medio del Estrecho, un refresco. Llegará, junto a la gasolina, en una de las lanchas de aprovisionamiento que tienen los narcotraficantes.

"Esta claro que estando días en el mar necesitan aprovisionamiento, tanto de combustible como de comida", explica José Encinas de AUGC. "Muchas de las embarcaciones que se acercan a costa se dedican a eso, a llevar gasolina y comida".

"Les llaman gomitas", explica Francisco Mena de la Coordinadora contra la droga Alternativas. "Hay toda una estructura y toda un red logística para aprovisionar a los encargados del alijo".

Porque las tripulaciones pueden estar varios días en el mar, y hay que comer. Por lo general cosas saladas, y poco líquido, para evitar el mareo.

"Hombre, esta gente con todo lo que fuman de porros, con todas las rayas que se meten, con todas las bebidas energéticas que beben, no comen mucho", cuenta a NIUS un agente. "Pero en el mar si no comes te mareas, y hay que tener algo en el estómago".

Ese algo es de lo más variado, tan variado como los gustos de sus tripulantes. No debe faltarles de nada. Comida en lata, yogures, paquetes de embutidos, pan de molde. Comida que suelen transportar a popa, en unos pequeños bidones grises impermeables, en los que intentan poner a salvo sus provisiones. De vez en cuando hasta se permiten comida rápida transportada, de forma más rápida todavía, desde algún establecimiento de La Línea.

"Hamburguesas también", nos dicen. "Una vez cogimos una goma de cuatro motores y la cubierta estaba llena de envases de un McDonald's. Si se les antoja una hamburguesa viene el de turno y se la trae".

Claro que si el narco es de comida casera, puede que hasta le lleven la comida hecha: "Una vez abordamos a unos ceutíes y llevaban a bordo una olla con potaje", narra nuestro agente. "Intentaron huir con olla y todo. Ya ves, que una olla pega un salto en la persecución y te arranca el cráneo. Llevaban muchos días en el mar, estaban destrozados, daban pena. A veces las zodiac dan hasta asco, de los restos de comida que hay por el suelo".

Una de estas lanchas de aprovisionamiento parece haber sido la protagonista de la escena que se ha vivido en una playa de La Línea, cuando huyendo de las fuerzas del orden, embarrancaba entre los bañistas. Los detenidos no llevaban trajes de agua sino un simple chándal. El uniforme de estos peculiares riders del Estrecho.