El presunto asesino de Manuela Chavero regresa al lugar del crimen para un registro de más de cinco horas


Eugenio Delgado, detenido por el crimen de Manuela Chavero en Monesterio, ha estado presente este jueves en un nuevo registro
Agentes de la UCO y la Unidad de Criminalística de la Guardia Civil han registrado durante horas la vivienda del detenido
Buscaban nuevos indicios y material informático importantes para la investigación
El 17 de septiembre, Eugenio Delgado, de 28 años, era detenido por la Guardia Civil en Monesterio (Badajoz) por la desaparición y muerte de la que era su vecina, Manuela Chavero, a quien este hombre confesó haber golpeado en la cabeza accidentalmente y, asustado, haber trasladado su cuerpo hasta un pinar cercano de su propiedad para enterrarlo. Sin embargo, los investigadores mantienen la hipótesis de una presunta agresión sexual que la autopsia no pudo determinar. Por ello, a pesar de que hace más de dos meses del ingreso en prisión del detenido, éste ha vuelto al lugar de los hechos para acompañar a los agentes en una nueva pesquisa.
En torno a las 9 de la mañana de este jueves, agentes de la UCO y el grupo de Criminalística de la Guardia Civil llegaban al número 29 de la calle Cerezo de Monesterio, la vivienda donde residía solo Eugenio Delgado, acompañados del mismo. Allí, durante más de cinco horas, los investigadores han vuelto a peinar y registrar exhaustivamente la vivienda en búsqueda de “elementos materiales y soportes informáticos” que pudieran esclarecer la investigación, sin más detalles. Tras registrar el interior de la vivienda, los agentes también se han adentrado en el garaje anexo a la casa. Vuelven allí para intentar hallar indicios que pasaran por alto cuando registraron, por primera vez, la vivienda de Eugenio. En aquella ocasión, en el mes de septiembre, la unidad de Criminalística se centró en hallar restos biológicos, como sangre.

Al finalizar el nuevo registro, el detenido, que ahora camina en muletas, era conducido de vuelta a la prisión de Badajoz, donde permanece ingresado sin fianza tras reconocer los hechos. Aunque asegura que no la mató, sí confesó que Manuela Chavero sufrió, según su versión, un fuerte golpe en la cabeza tras una discusión y un forcejeo en el que la víctima, presuntamente, intentaba arrebatarle una cuna que le había prestado al detenido tiempo atrás.
La familia de Manuela Chavero denunció su desaparición en julio del año 2016. Fue entonces cuando esta vecina de Monesterio (Badajoz) de 42 años se esfumó una madrugada de su casa, dejando las luces e incluso la televisión encendidas, pero sin rastro de dónde pudo haberse marchado. El pasado mes de agosto, el caso daba un vuelco con una sorpresiva reconstrucción de los hechos que los investigadores llevaron a cabo en la vivienda de Chavero. Desde entonces, el caso se ha acelerado para alivio de la familia, hasta que el propio detenido, cuatro años después, condujo a los agentes al lugar en el que había enterrado a Chavero tras su muerte.