El padre y sus dos hijos muertos en una piscina de Mijas no sabían nadar

La niña de 9 años no podía salir del agua, su padre y su hermano se lanzaron a ayudarla
El gorro que llevaba la pequeña fue encontrado en el sistema de succión de la depuradora
Pudieron sufrir lo que se conoce como el Síndome AVIR: una víctima acuática en lugar del rescatador
Ni el padre ni los niños sabían nadar. Es lo que han declarado los familiares de los tres británicos fallecidos este martes en la piscina del Club La Costa de Mijas. Sus testimonios son ahora una pieza fundamental para determinar qué pudo ocurrir. Los informes preliminares de las autopsias señalan que el padre de 53 años, su hijo de 16 y la menor de la familia murieron ahogados, por asfixia.
En la inspección ocular realizada por los agentes de la Guardia Civil, encontraron el gorro que llevaba puesto la pequeña de 9 años mientras se bañaba en este complejo turístico en el sistema de succión de la depuradora. Todo hace pensar que la prenda pudo quedar atrapada en el fondo, por causas que ahora se investigan, y que la niña intentó recuperarlo.
Siguiendo esta hipótesis, la pequeña pudo meterse en una zona en la que no hacía pie y comenzó a pedir auxilio. Su hermano se lanzó al agua pero no conseguía sacarla por eso el progenitor no se lo pensó dos veces.
Según Luis Miguel Pascual, director de investigación de la plataforma tuahogamiento.com es lo que se conoce como el Síndrome AVIR -por las iniciales del inglés Aquatic Victim Instead of Rescuer- lo que puede traducirse como una Víctima Acuática en Lugar del Rescatador, un fenómeno muy extendido: "en estas situaciones la respuesta es instintiva, todo se precipita. Pueden incluso haberse impedido uno a otro y haberse ahogado los tres. Personas que no saben nadar pueden sufrir pánico y la tragedia se desencadena en apenas un minuto. El ahogamiento de personas intentando rescatar a seres queridos es por desgracia bastante frecuente. Se asumen riesgos que no se harían en otra situación."