Los perros de la Guardia Civil encuentran restos biológicos en la vivienda del presunto asesino de Marta Calvo

Un perro especializado en detectar restos biológicos señala el suelo de la entrada y un plato de ducha
Mientras continúan buscando el cuerpo en el vertedero de Dos Aguas
Jorge Ignacio Palma, el presunto asesino de Marta Calvo, regresaba hoy a su vivienda de la localidad valenciana de Manuel para presenciar la inspección ocular ordenada por los agentes de homicidios de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil.
La vivienda ya había sido registrada anteriormente, aunque era la primera vez que los investigadores accedían con perros especializados en detectar restos biológicos de personas. Los canes han señalado distintos puntos de la casa: en el suelo de la entrada y también en un plato de ducha en el baño de la planta baja, donde según la versión del detenido, descuartizó el cuerpo de la joven antes de arrojar sus los restos en distintos contenedores.
Ahora habrá que confirmar si estos restos pertenecer a la valenciana de 25 años desaparecida el pasado 7 de noviembre, por lo que agentes de científica tendrán que tomar muestras para después analizarlas. Por eso la inspección se prolongará durante varias horas. Ahora deberán levantar los suelos para descubrir las tuberías y desagües con el fin de recoger posibles muestras de ADN.
Mientras continúa la búsqueda del cuerpo de Marta Calvo en el vertedero de Dos Aguas, donde agentes de la Guardia Civil han recogido algunos efectos que van a ser analizados. La forense ha confirmado que los restos encontrados hasta ahora son de origen animal y que además llevaban varios meses en ese lugar por lo que de momento no han encontrado ninguna pista fiable. Los investigadores también estudian minuciosamente el rastro que dejaron los teléfonos móviles de Marta y del único sospechoso, que podría ser determinante para descubrir los movimientos que hizo el homicida tras la muerte de la chica.
Jorge Ignacio P.J. se mantiene impasible y se niega a declarar, siguiendo las indicaciones de su abogado. Fue enviado provisionalmente a la prisión de Picassent el pasado 6 de diciembre, dos días después de entregarse voluntariamente en el cuartel de la Guardia Civil de Caircaxent y confesar ser el autor de la muerte de Marta Calvo. De momento se le acusa de homicidio, ya que sostiene que la muerte de la joven fue accidental, por un elevado consumo de cocaína. El detenido podría quedar acusado también por su presunta implicación en la muerte de otras dos mujeres que ejercían la prostitución en casas de citas de Valencia en los últimos meses.