Los residentes de un pueblo de Cantabria crean un grupo de Whatsapp para hacer frente a los okupas

Más de 200 vecinos de la localidad cántabra de Meruelo han creado un chat para "dar la alerta" de las ocupaciones y frenarlas mediante "acciones pacíficas"
Cuando Abel puso su chalet de Meruelo a la venta lo último que se imaginaba es que este acabaría siendo okupado. Y es que las ocupaciones ilegales de casas se han convertido en todo un problema en este municipio cántabro de apenas 2.000 habitantes y han puesto en pie de guerra a sus vecinos.
Porque los ciudadanos de Meruelo han hecho de la lucha contra los okupas su causa. Y es que más de 200 residentes de esta localidad cántabra se han unido para crear un grupo de WhatsApp con el que avisar y echar a los okupas que intenten adueñarse de las casas vacías del pueblo.
Si un vecino es testigo de la ocupación o el robo de una vivienda, su misión es la de "dar la alerta" en el grupo de WhastApp para que el resto de residentes se acerque a protestar ante la casa tras dar el aviso a la Guardia Civil. Una labor clave, ya que si las ocupaciones se detectan en las primeras 48 horas, es más probable que los agentes consigan desalojar a los intrusos.
¿Cómo se organizó este grupo de WhatsApp?
Alfonso, uno de los miembros de este grupo impulsado por la Plataforma de Vecinos de Meruelo, nos cuenta que la idea de organizarse para llevar a cabo "acciones pacíficas" contra los okupas nació después de los incidentes que estos provocaron en el municipio.
"El pueblo estaba un poco intranquilo", dice, "había habido algún que otro acto incívico con vehículos y peleas entre los okupas". La gota que colmó el vaso fueron los incidentes que varios de estos asaltantes de viviendas provocaron en dos cafeterías, en las que se encararon con los dueños e incluso llegaron a tirar vasos y alguna que otra mesa.
Fue entonces cuando los vecinos de Meruelo dijeron basta y comenzaron a organizarse para hacer frente no sólo a los asaltantes que mantienen ocupadas tres viviendas en el municipio, sino también a los que están por venir. "El temor que hay es el efecto llamada que entre ellos mismos se hacen. Esta gente no deja de estar oganizada y cuando se acomodan en un pueblo van llamando a familiares o gente de su entorno", dice Alfonso.
El pasado domingo esta Plataforma de Vecinos de Meruelo se reunió por primera vez para explicar cómo iba a funcionar este grupo de WhatsApp y las "medidas disuasorias" que iban a llevar a cabo.
Una de ellas ha sido la de llenar los balcones y ventanas del pueblo de banderas con el lema 'Meruelo sin okupas' para que todos los okupas que se acerquen a la localidad "vean que todos los vecinos están muy pendientes de este tema y se marchen para otro lado".
En los próximos días esta agrupación vecinal también pedirá al Ayuntamiento de Meruelo y al Gobierno de Cantabria la presencia de más medios policiales en las calles. "Lo que se pretende es que no vengan más", dice Alfonso. "Si se consigue que no estén tan a gusto a ver si poco a poco se van para otro sitio".