Anja Rubik, la modelo que dejó las pasarelas de París por fotografiar la guerra en Ucrania


La modelo, fotógrafa y activista polaca viaja a Ucrania a ayudar y a documentar, con su cámara, las consecuencias de la invasión rusa
Tiene un millón y medio de seguidores en Instagram, con los que ahora comparte las fotos de su trabajo en Ucrania
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Jueves, 24 de febrero. Rusia ataca a Ucrania. Nadie en Europa da crédito a lo que está ocurriendo. A la conocida modelo y activista polaca Anja Rubik, la noticia le llega en París, trabajando. Pero la fotografía que comparte ese día, en su cuenta de Instagram, no tiene nada que ver con su trabajo. Rubik es muy conocida, entre otras cosas, por ser modelo de Victoria's Secret. La siguen casi un millón y medio de personas. Pero el 24 de febrero su publicación fue el 'repost' de una foto de Kiev bombardeada, que habían compartido dos periodistas. Ella comenta: "Estoy aterrorizada. ¿Cómo es posible esto, en Europa, en 2022?"
Tres días después, comparte la portada del New York Times con la bandera de Ucrania. Y un largo texto en el que muestra su rabia e impotencia por lo que está ocurriendo. "La guerra es horrible y lo que está pasando en Ucrania es simplemente cruel y repugnante... / ... Acabo de bajar del avión, el aeropuerto funciona como siempre, como si todo fuera "normal"... pero a pesar de esta "normalidad" no se puede ocultar que no hay nada normal en nuestro mundo en este momento!", exclama indignada.
Pasan los días, y la modelo sigue compartiendo noticias y fotos sobre la guerra. Su cuenta de Instagram ya solo habla de eso. El 5 de marzo se echa a las calles, en París, para protestar "contra las acciones bárbaras de Putin y la guerra en Ucrania".
En el texto que acompaña a su foto, leemos: "Mis queridos amigos de Ucrania, estoy destrozada por lo que le está ocurriendo a vuestro país y a vuestra gente. ¡Mi corazón se está rompiendo y admiro vuestra valentía! ¡Millones de personas en todo el mundo os apoyan! ¡No estáis solos!". En ese momento, Rubik, de 38 años, decide que tiene que hacer algo.
Voluntaria en la frontera polaca
El 9 de marzo, comparte un tuit del presidente ucraniano sobre el ataque ruso al hospital materno-infantil de Mariúpol. Y aquello debió de ser el detonante. Al día siguiente, el 10 de marzo, Anja Rubik llega a la frontera de Polonia como voluntaria.
Se une así a otros polacos que, como ella, tratan de ayudar a los millones de ucranianos que escapan de las bombas. Su primera foto, ese mismo día, es de un agricultor polaco que reparte sopa caliente. "El caballero de la imagen ofrece su famosa sopa de guisantes, que trajo hasta aquí en su tractor. “Tienes que ayudar a la gente”, me dice mientras sirve un plato de sopa a una joven que acaba de cruzar la frontera, escapando del este de Ucrania. Sus padres se quedaron atrás", cuenta Rubik en Instagram.
La Rubik modelo da paso a la Rubik fotógrafa y activista. No es la primera vez que hace suya una causa. En 2019, ya protagonizó una impactante campaña para concienciar acerca del problema del plástico en los océanos. Pero esta vez, le toca más de cerca. Es Ucrania. Son sus vecinos.
Desde el 10 de marzo, su cuenta de IG comienza a documentar la guerra. En el paso fronterizo de Hrebenne, trata de reflejar el trabajo de los "maravillosos voluntarios, rescatistas, policías, el maravilloso Sr. Krzysztof, todos con el corazón en un puño". Y añade una cita del activista y pacifista sudafricano Desmond Tutu. "Hay mucha maldad en el mundo pero también hay mucho bien, de hecho estamos hechos para el bien".
Sus siguientes publicaciones son un llamamiento a la paz en Ucrania. En ellas vuelve a aparecer la Rubik modelo, pero ahora utilizando su imagen únicamente para apoyar esta causa. En uno de los textos que las acompaña, explica por qué lo hace.
"Todos somos ciudadanos"
"La moda siempre se ha nutrido de lo que sucede en el mundo. Cómo nos vestimos se deriva de dónde y cómo vivimos, y de a lo que estamos sujetos. Bill Cunningham dijo que la moda es la armadura para sobrevivir a la realidad de la vida cotidiana. Y seamos claros: todos tenemos derecho a expresar nuestra opinión política, ya seamos diseñadores, modelos o editores. Todos somos ciudadanos".
Días después, Rubik entra en Ucrania. Llega a Leópolis y comienza a colaborar canalizando donaciones privadas hacia la población y los hospitales más necesitados. Y todo ello sigue quedando plasmado en su cuenta de Instagram.
Documentar los impactos de la guerra
Cámara en mano, la modelo, activista y fotógrafa empieza a documentar la ciudad en tiempos de guerra, las consecuencias que está teniendo la invasión rusa, tanto en la población como en la propia ciudad. Algunas de esas fotografías las vemos en su última publicación compartida hasta el momento, fechada el 20 de marzo.
Son fotos preciosas y, a la vez, desgarradoras. Desde el retrato de una joven ucraniana que acaba de aprender a usar armas hasta la desesperación de los que tratan de escapar en tren, en la estación de Leópolis.
Rubik ha documentado cómo "civiles de todas las edades aprenden a cargar armas, usar rifles Kalashnikov y lanzar granadas, además de aprender algunas habilidades básicas de primeros auxilios". Según explica ella misma, "las sesiones de formación son impartidas por voluntarios, normalmente con experiencia militar o médica". Y concluye: "¡Todo esto está tan cerca de casa! Es una realidad que nunca pensé que viviría en el corazón de Europa. La resistencia y la valentía del pueblo ucraniano son extraordinarias".
Tan extraordinarias como su historia. La modelo regresó a Polonia el pasado viernes, según cuenta el Wall Street Journal, que ha sacado a la luz su trabajo. Pero Rubik asegura que planea regresar a Ucrania en los próximos días. De momento, las pasarelas tendrán que seguir esperando.