Por qué el verde, el rojo y el dorado son los colores de la Navidad


Estos colores han formado parte de la Navidad desde hace siglos, aunque con el consumismo se han consolidado
Algunos expertos sitúan el orígen de estos colores navideños en la Edad Media
En NIUS, te explicamos qué simbolizan el verde, el rojo y el dorado, tan populares en estas fechas
Todos los colores tienen una simbología que añade significado a las superficies que decoran. A lo largo de la Navidad, es muy frecuente decorar calles, tiendas y hogares con el rojo, verde y dorado, entre otras tonalidades.
Esta paleta cromática se ha consolidado durante las últimas décadas y las marcas la usan también en los envoltorios y cajas que envuelven los productos. El objetivo de dicha decoración no es otro que impulsar las compras durante estas fechas.
El verde

Este color tan característico se encuentra en gran parte de la decoración navideña, especialmente en el popular árbol de Navidad o en las coronas verdes que decoran las puertas de los hogares, entre otros elementos decorativos.
El verde representa la naturaleza. En la actualidad también es un color asociado al ecologismo y el futuro del planeta. En un contexto navideño representa también la esperanza y el porvenir.
El rojo

Este color tan vivo es sin duda el más característico de la Navidad. Aunque en otro contexto se considera un color violento asociado a las pasiones, en esta época representa el amor y la generosidad.
El rojo ya está documentado en celebraciones navideñas durante la Edad Media, aunque su popularidad ha crecido en paralelo al consumismo, también asociado a estas fechas.
De hecho, fue una conocida empresa de refrescos la que usó por primera vez este color para vestir a Papá Noel. En un inicio, este personaje llevaba ropaje verde.
Dorado

Este color resplandeciente es el aliado perfecto para estas fechas. Muchos envoltorios, productos y tarjetas lo llevan para destacar por encima del resto. Según el Nuevo Testamento, los Reyes Magos llevan presentes a Jesús y estos son incienso, oro y mirra.
Es decir, el color dorado representa la majestuosidad, pero también la riqueza y el sustento económico. Es por ello uno de los colores a tener en cuenta en la decoración navideña.