El 'boom' del 'caravaning' en España: "Es una locura, tenemos casi todo reservado para el verano"


La pandemia ha hecho crecer el interés por este tipo de vehículos que permiten una forma más segura y libre de disfrutar de las vacaciones
La venta y alquiler de autocaravanas y camper se ha disparado
Con el 80% de reservas el sector está a punto de colgar el cartel de 'sold out'
Las autocaravanas están de moda. La demanda de estos vehículos que llevan 'la casa a cuestas' se ha disparado desde el año pasado. "Ha crecido todo, la compra de vehículos nuevos, de segunda mano, de alquiler.... Es una locura", reconoce a NIUS Felipe López, gerente de VOYenVAN, una empresa madrileña especializada en el sector del caravaning.
Es una tendencia que ya se inició en 2019, año en que se batieron todos los récords, con 9.000 autocaravanas vendidas, pero que la pandemia ha terminado de impulsar. En el 2020 se repitieron los mismos números, aún estando cerrados tres meses, y el 2021 se perfila aún mejor. "Nosotros hemos tenido que ampliar la flota de alquiler ante la enorme demanda que teníamos este verano", explica López. "Y con la venta más de lo mismo, nos hemos quedado sin vehículos nuevos en stock, los hemos vendido todos", afirma. "Ahora mismo si un cliente quiere un vehículo nuevo no lo puedo pedir porque no hay en las fábricas, están agotados. También porque la pandemia ha reducido la producción", explica.
"Para hacerse una idea de cómo están las cosas", avanza López, "os diré que los vehículos nuevos que tenía pedidos hace tiempo y me han ido entrando los he tenido que pasar a renting porque si los vendo me veo en agosto sin autocaravanas ni camper para alquilar", reconoce.
"¿Que si vivimos un boom?, por supuesto", apunta Txema Sánchez, gerente de Autocaravanas Norte, una empresa de caravaning implantada en Cataluña, Andalucía y País Vasco. "La gente llega con una emoción tremenda, a veces rozando casi la histeria. Si compran la autocaravana se la quieren llevar en ese mismo momento", relata. "El covid ha ayudado a empujar al sector porque este tipo de vehículos te permiten un extra de seguridad al viajar. El hecho de tener tu núcleo familiar en una burbuja ha animado a mucha gente a interesarse por el mundillo de la autocaravana", explica.
Ocupación del 80%
Las cifras no engañan. "Nunca se había vivido esta situación a principios de junio", aclara el gerente de VOYenVAN. "En estos momentos tenemos una ocupación alrededor del 80% para julio y agosto, o sea que cuando acabe junio es casi seguro que ya estemos completos", avanza. "Agosto es un mes que siempre se llena, pero mucho más tarde, a finales de julio, este es un fenómeno que no habíamos tenido nunca. Además ya hay un montón de reservas para septiembre y octubre, algo también nuevo para nosotros", dice.
España cuenta con una flota de más de 5.000 autocaravanas para arrendar, el precio medio de alquiler son unos 150 euros diarios, dependiendo del tamaño y del tipo de vehículo.
Pero si las autocaravanas están de moda, las que arrasan son las camper, las furgonetas adaptadas. De hecho la camperización de furgonetas creció un 140% el año pasado y al ritmo actual se superará esta cifra con facilidad.
Caravaning: de opción cutre a lo más 'in'
"Ha cambiado mucho la visión que se tiene de esta forma de viajar", dice a NIUS Txema Sánchez, gerente de Autocaravanas Norte. "Antes se pensaba que el que alquilaba o compraba una autocaravana lo hacía por ahorrar y es absurdo, porque si quieres ahorrar no te gastas 150 o 180 euros al día de alquiler y menos aún te la compras. Nueva cuesta como mínimo 52.000 euros", apostilla. "Durante años hemos tenido que escuchar cosas tipo "Si es más caro que un hotel, y en el hotel te hacen la cama... pero afortunademente cada vez menos. La gente empieza a ser consciente de que es una forma diferente de viajar".
"Ahora mismo se está empezando a considerar lo que es, un artículo de lujo. Poder tener un vehículo de estas características es un privilegio. No cualquiera puede comprase un coche de 50 o 60.000 euros", argumenta Sánchez.
"Han influido mucho en este cambio en la forma de verlo las redes sociales", apunta Felipe López, de VOYenVAN. "De repente los youtubers, instagramers, etc, están promoviendo en sus cuentas esta forma de viajar. Esto está haciendo que llegue a un público mucho más joven".
"Es cierto, el perfil ha cambiado mucho", espeta Sánchez. La edad media de los potenciales clientes que tenemos ha bajado unos diez años. Antes la media estaba en 45 y ahora está en los 35. La gente es cada vez más joven", asegura.
Más cerca de la naturaleza
"La pandemia ha hecho cambiar el chip a muchas personas, pero de forma bestial", indica Sánchez. Gente que no se planteaba esta forma de viajar o que lo pensaba para cuando se jubilara se ha dado cuenta de que la vida son dos días y han decidido disfrutar ahora que están todos en familia".
"También el confinamiento ha hecho que la gente se replantee el poder estar más tiempo al aire libre, más cerca de la naturaleza, y eso también les ha empujado hacia el caravaning. Los que no lo conocían quieren probar la experiencia y a los que ya les gustaba se han decido a comprar", dice Txema Sánchez.
Es el caso de Reme y Gonzalo, una pareja que ya de novios viajaba con una furgoneta camperizada, pero que desde que tuvieron mellizos lo habían dejado en stand by. "Llevábamos tiempo pensándolo y hace unos meses nos decidimos a comprar por fin, sobre todo porque si esperamos más se nos pasa la edad para que los niños disfruten. Ahora tienen 6 años, nos quedan otros seis o siete para que gocen al máximo de esta experiencia", aseguran.
Aunque en este tiempo han alquilado varias veces una autocaravana para hacer viajes largos. "Hemos ido con los niños a los Alpes y a Córcega", al final han optado por comprar una camper, la opción más de moda. "Es más versátil, nos permite movernos más rápido, improvisar y utilizarla cualquier fin de semana. Nuestro objetivo es salir con ella lo máximo posible", explican. "Que quieres salir y está lloviendo, lo aplazas, que de repente sale el sol, en un segundo lo montas todo y te vas. Que no te ha dado tiempo a hacer la compra, paras en el camino en cualquier super y coges lo que necesitas", dicen. "Es muy cómodo".
"Nos aporta libertad, flexibilidad e independencia", que son cosas que no tienen precio. "Yo practico piragüismo, kayak en aguas bravas, y con la camper puedo llegar con mi familia a lugares recónditos donde no hay donde alojarse", cuenta Gonzalo.
"Queríamos que los niños crecieran con un contacto más directo con la naturaleza y da gusto verlos, cómo exploran, cómo disfrutan", apostilla Reme. "Están muy contentos, vuelven siempre deseosos de contar su experiencia a su amigos y además es muy positivo para la familia porque al pasar tantas horas juntos se hace mucha piña", recalca.
Los peligros de este 'boom'
"Hay autocaravanas y camper por todos lados", se queja Reme. "Esta Semana Santa, como no se podía salir de Madrid, fuimos a varios destinos dentro de la Comunidad y nos encontramos con aparcamientos en los que había 100 vehículos". "Algo exagerado, yo no había visto esto en la vida".
"En zonas costeras empiezan a a poner muchas trabas para dejar autocaravanas y camper, y con razón en muchas ocasiones. Hay gente que monta su chiringuito a pie de costa y se queda ahí todo el verano. Es necesario que se regule para que la gente no pueda aparcar en cualquier lado", defiende Gonzalo.
El problema es que el número de autocaravanas y camper aumenta mucho más rápido que las infraestructuras que precisan. Actualmente hay unas 1.000 áreas de autocaravanas en España, lejos de las 3.000 que se necesitarían para ponerse al nivel de países como Francia o Alemania, más acostumbrados a este tipo de turismo.
"La inversión que tendrían que hacer los Ayuntamientos es mínima y el retorno es muy grande", indica Txema Sánchez, de Autocaravanas Norte, "porque estos vehículos necesitan poco: una zona delimitada para aparcar, para desaguar las aguas grises -de la ducha y el fregadero-, las aguas negras del baño y una fuente para cargar agua limpia", especifica. "Y el retorno es muy grande porque el turista de autocaravana está demostrado que es un turista que no da problemas, es limpio y se gasta dinero ahí donde va, en restaurantes, tiendas...".
"Así ha sido hasta ahora, pero la verdad es que con esta marabunta de gente que se ha apuntado al caravaning las cosas están empezando a cambiar", denuncian Gonzalo y Reme. "Cada vez te encuentras más suciedad y menos civismo", lamentan. "Ojalá haya una regulación que permita seguir disfrutando de esta forma única de viajar".