Lo que no se vio del adiós de ‘La que se avecina’ a Montepinar: el ‘making of’ y la fiesta sorpresa final

Telecinco emitió este lunes 25 de abril el último capítulo de la temporada 12 de La que se avecina, que supone un fin de ciclo, ya que es el último rodado en la urbanización Mirador de Montepinar, donde han sucedido todas las tramas desde el estreno de la serie en 2007.

Telecinco y la productora Contubernio ya están rodando la temporada 13, que supondrá un punto y aparte con mudanza a otro edificio, en una nueva etapa en la que continuará buena parte del reparto, con algunas bajas como la de Víctor Palmero (Alba).

Pero cuando se rodó este capítulo 170, antes de que fueran demolidos los decorados de los estudios Moraleja de Enmedio (Madrid), el equipo aún no sabía si la serie continuaría o era una despedida definitiva.

NIUS estuvo en el rodaje de algunas escenas de este capítulo con aire de despedida y gran carga emotiva para el equipoen el que los montepinarios se atrincheran en el búnker de Antonio Recio para evitar que les desalojen del edificio, hasta que Doña Fina (Petra Jiménez) termina solucionando el problema.

No era la última escena del guion pero sí la última que rodaban en Montepinar todos juntos, antes de decir adiós a esos tres platós que han sido su segunda casa durante 17 años, ya que allí se grabó también la serie predecesora, Aquí no hay quien viva. Así es como se vio en televisión:

En este vídeo os mostramos lo que no se vio en televisión. Cómo se preparaban para las escenas, las indicaciones de la directora, Laura Caballero, los trucos para soportar el calor infernal en un espacio tan reducido, y momentos emotivos como la ovación a Petra Jiménez tras grabar su última secuencia en la serie:

En los pocos parones de grabación, las bromas de Fernando Tejero, Carlos Areces y Miren Ibarguren relajaban el ambiente, pero era un día especial, los sentimientos estaban a flor de piel y alguna lagrimilla ya asomaba en los vecinos más sensibles, como Vanesa Romero, creyendo entonces que estaba trabajando por última vez con muchos de sus compañeros, hasta que se decidiera -como finalmente ha sido-, si volverían a reunirse en un proyecto posterior. Meses después, Mediaset anunciaba que la serie continuaba con tres nuevas temporadas (14, 15 y 15) garantizadas para los próximos años.

“Tenemos sentimientos encontrados, por un lado deseando acabar, pero por otro no, porque sabemos que es un adiós muy especial a estos platós”, lamentaba Víctor Palmero (Alba en la serie), uno de los actores que recientemente se ha sabido que no estará en la nueva temporada.

La directora, Laura Caballero, y la actriz Cristina Medina (Nines), a la que meses después le dignosticaron un cáncer de mama contra el que lucha actualmente, se emocionaban entonces entre bambalinas, al recordar las vueltas que han dado también sus vidas personales en esta última década. “Nos hemos enfadado, hemos reído, hemos llorado... Muchas hemos sido madres, prácticamente todos nos hemos divorciado, hemos cambiado de pareja, ha habido barrigones, cesáreas, vomitonas...”, decían.

El último día de rodaje fue una intensa jornada de ocho horas de grabación en un espacio reducido que recreaba el búnker, en el que el calor que ya arreciaba en Madrid, la máxima concentración de todos en la interpretación y la nostalgia de pensar que se acercaba el final formaban una olla a presión que estallaba a las once de la noche, cuando la directora dijo “toma buena, hemos terminado”.

Pero antes de despedirse, los hermanos Alberto y Laura Caballero tenían una sorpresa final para el equipo en el hall de la productora. Una enorme tarta de dos pisos y un brindis para celebrar los 17 años que muchos de ellos han pasado en estos platós, los últimos 13 en La que se avecina.

En el vídeo que encabeza este artículo podemos ver las risas, aplausos, abrazos, lágrimas de emoción y mensajes de agradecimiento por todo lo compartido y aprendido en estos decorados que ya son historia.

Todos decían adiós a Montepinar pero ninguno quería hacerlo de La que se avecina, especialmente José Luis Gil, el único del reparto que ha estado en estos platós desde el primer día.

"Históricos somos todos... no me voy a despedir nunca de La que se avecina, siempre va a ocupar un lugar muy importante en lo personal y profesional”. “Me niego a despedirme y, además, no sé si debo hacerlo todavía”, reconocía el actor, que ahora se recupera del ictus que sufrió el pasado noviembre, aludiendo entonces a la la continuidad de la serie que estaba en el aire.

Para Loles León, su etapa en La que se avecina hasta el final de esta temporada 12 ha sido “más corta” que la de José Luis Gil, pero “muy intensa”. “Estoy muy agradecida, ha sido una gozada poder reencontrarme con los compañeros, sobre todo Alberto y Laura Caballero, ¡y descubrir a mi Yoli!", decía de Miren Ibarguren, su hija en la serie.

La actriz vasca, embarazada ahora de su primer hijo junto a su pareja, Alberto Caballero, tampoco ha estado los 13 años en La que se avecina. "Han sido bastante menos, pero solo puedo estar agradecida a todo el equipo técnico y artístico por este tiempo, y a Loles, ¡que es lo más!”, decía dando prueba de la fuerte amistad surgida entre ellas detrás de la pantalla.

Los que sí han estado desde el principio son Eva Isanta y Pablo Chiapella, el agitado matrimonio de ida y vuelta que forman Maite Figueroa y Amador Rivas en la serie. “Te quiero mogollón”, le decía ella al recordar todo lo vivido: “Pero también nos peleamos, ¿eh? Aunque siempre ha podido el amor y, sobre todo, la admiración por este pedazo de actor”.

Él se incorporó a La que se avecina algo más tarde que ella, y recuerda cómo se aferraba a su compañera en los inicios de la serie, porque le daba seguridad. “Cuando yo llegué, ella ya llevaba un camino hecho aquí, y yo me agarraba a ella todo el rato, estábamos siempre juntos, luego ya el guion nos separó...”, nos decía en alusión a la ruptura de la pareja en la serie y las vueltas que han dado después ambos personajes.

“También es verdad que cuando nos divorciamos tu personaje evolucionó hacia otro lado, pero al final hemos crecido juntos”. “Los Cuquis siempre están unidos, uno no hubiera existido sin el otro”. Cuando aún no sabíamos que habría más temporadas, les preguntamos si harían un spinoff y respondían, entre risas: “Bueno, ¿por qué no? Lo que tenga que ser será”.

“No os preocupéis, hay mucha vida después de La que se avecina advertía con razón Pablo Chiapella (Amador) a los fans, antes de regalarnos uno de sus clásicos: “¡Caña aquí!”.

De las claves de este final de etapa también hablamos con el creador y productor de la serie, Alberto Caballero, durante el rodaje de estas últimas escenas.

Cuando rodaron los ocho últimos capítulos de la duodécima temporada, aún no sabían si continuarían o no, por lo que quisieron hacer un final especial, pero abierto.

"Es un canto a la unión vecinal, se defienden juntos de una agresión y al final acaba bien, dejan el edificio emblemático pero siguen juntos, es un final bonito", nos contaba el creador de la serie.

El último capítulo ha sido atípico, un homenaje al edificio, que es el auténtico protagonista. Un "homenaje a los decorados históricos, porque el núcleo, la esencia de la serie siempre ha sido el edificio". "Los espacios tienen una energía propia, parte es de sus diseñadores, pero hay otra muy importante espiritual de la gente que los habita". "Montepinar es una mezcla de la energía del edificio y de todos los personajes que han pasado por él, es el auténtico protagonista de la serie".

Por ello, los guionistas de la serie -Alberto Caballero, Dani Deorador y Araceli Álvarez de Sotomayor- escribieron un último capítulo en el que toda la acción transcurría en el edificio, "y que fuera lo más coral posible para no cometer la injusticia de qué personajes tienen más o menos tramas".

Esta temporada es un cierre de ciclo para el equipo, de forma que el final es un "balance de estas 12 emporadas y 17 años de nuestra vida grabando aquí de forma ininterrumpida". Por eso, "nos apetecía que los personajes hicieran balance de sus vidas, que se puedan tirar los trastos si hace falta y quedarse a gusto".

El búnker que Antonio Recio (Jordi Sánchez) creó hace varias temporadas jugó un papel especial, tal y como ya se vio en esta foto del rodaje compartida por Caballero:

"Nos hacía gracia que una ida de olla de Recio se convierta en una herramienta a favor de los vecinos. Es una mezcla de Lost yLost Doce hombres sin piedad,.

"No", responde Caballero. "El final que pensábamos en un principio fue el del capítulo 100, ya emitido, cuando descubren que son personajes de ficción como en El show de Truman.

Entonces los fans nos pedían algo especial y como no sabíamos si esa sería la última temporada, porque nunca se sabe con la audiencia, la salida de los protagonistas al mundo real nos parecía un final perfecto". Pero el final de esta duodécima temporada "lo decidimos en 2021, cuando supimos que teníamos que abandonar estos decorados".