Ryusei Ouchi, el 'skater' ciego que desafía la gravedad en Japón

Una afección ocular le ha dejado ciego pero con la ayuda de un bastón no ha dejado de practicar su deporte favorito
Ryusei Ouchi es un joven japonés, ciego desde los 7 años, que disfruta como un skater más en cualquier skatepark. Para practicar este deporte usa su bastón para sentir cualquier barrera física que pueda encontrar en su camino.
Al igual que todos los skateboarders, la velocidad del aire, la emoción del viaje y la sensación de completar una pirueta es parte de lo que atrajo a este chico invidente de 19 años. Sin embargo, Ouchi, que podía ver bien cuando nació, perdió la vista a los siete años le diagnosticaron una afección ocular. Pese a todo, con la ayuda de un bastón practica skate habitualmente en un parque local en Tokorozawa, al norte de Tokio.
Deslizándose por grandes rampas, ‘grindando’ (como se dice en la jerga a desplazarse en barandillas), e incluso realizando trucos parado, Ouchi ha impresionado a la comunidad local de skaters, y se ha ganado un gran número de seguidores en las redes sociales.
Es muy consciente de los peligros, pero asegura que es algo va implícito a este deporte. “Si estoy patinando no controlo hasta qué punto puedo moverse seguro, pero así es la vida”, dijo Ouchi a la agencia Reuters.
Ouchi comenzó a usar la tabla a los 15 años cuando se aceleró su pérdida de visión. Se dio cuenta de que quería aprender antes de que fuera demasiado tarde. “En mi segundo año de secundaria, mi vista se puso realmente mala y, de repente, la enfermedad progresaba a un ritmo más rápido y comencé a entrar en pánico”, dice.
Practicar skate con amigos le dio a Ouchi una forma de expresarse y ahora va al parque varias veces a la semana para practicarlo. Asegura que le llevó tiempo acostumbrarse completamente al deporte, pero ahora tiene una buena imagen mental de su entorno, algo que le libera para realizar más piruetas.
El skateboarding se presentará como un nuevo deporte en los Juegos Olímpicos de Tokio del próximo año. Pero no será así para los Juegos Paralímpicos. Ryusei Ouchi espera que algún día sea una realidad.