España, epicentro y dispersora de la viruela del mono por todo el mundo

España es el país con más casos de viruela del mono del mundo. Se sabe que algunos de los contagiados viajaron a Portugal, Turquía y que ciudadanos de Reino Unido estuvieron en España en los círculos donde se han producido los contagios. Así que la pregunta es obvia: ¿es España el foco dispersor de la viruela del mono?

De momento ningún país aparte de Reino Unido ha encontrado a su paciente cero, es decir, el que ha iniciado el brote. Suele suceder cuando hay cierta transmisión comunitaria: a veces por mucho que los departamentos de salud pública se remonten y establezcan cadenas de contactos, no se llega a tener claro quién inició los contagios. En la consejería de Sanidad de Madrid trabajan con la hipótesis de que el caso índice en Europa sea el de ese ciudadano detectado en Reino Unido procedente de Nigeria, y saben que en la comunidad el monkeypox ha “entrado a la vez en más de una vía, es decir, con más de un caso. No solo por un caso”.

Lo cierto es que desde que la Organización Mundial de la Salud declaró la viruela humana erradicada, los casos de la variante de los monos de esta enfermedad que se han detectado fuera de África han sido muy pocos. Según datos de la Organización Mundial de la Salud, hubo infectados aislados en viajeros de Nigeria a Israel en septiembre de 2018, al Reino Unido en septiembre de 2018, diciembre de 2019, mayo de 2021, a Singapur en mayo de 2019 y a Estados Unidos en julio y noviembre de 2021.

La última actualización de la Organización Mundial de la Salud cuenta 180 casos de viruela de mono en 14 países. Donde más, en España, con 35 casos confirmados y 60 sospechosos en nueve comunidades. Tras nuestro país, Portugal con 23 positivos y reino Unido con 20.

José Antonio López Guerrero, profesor de Microbiología en el Departamento de Biología Molecular de la Universidad Autónoma de Madrid, explica que la dispersión simultánea de este virus es una novedad para los científicos: “Hasta ahora este virus se ha caracterizado por tener una muy baja tasa de transmisión entre humanos y ahora se está estudiando por qué se están dando tantos casos”.

Estanislao Nistal, virólogo y profesor de Microbiología de la Facultad de Farmacia de la Universidad CEU San Pablo de Madrid, cree que España sí podría ser el foco de algunos de los contagios en otros países: “Por las informaciones que han ido apareciendo estos días, y sin conocer aún todos los datos, puede que alguno de los brotes que están apareciendo tenga su origen aquí”. Pero que haya más casos en nuestro país no tiene que ver con que sea el origen de todo, ya que “en España, y debido a que se está haciendo un trabajo ágil e intenso a la hora de identificar y aislar los posibles contactos con los brotes aparecidos, puede que se esté llevando con más celo el tema del diagnóstico y debido a eso también haya más casos diagnosticados en estos momentos”. Nistal considera que se está haciendo un buen trabajo ya que “es importante que los casos sean detectados cuanto antes para tratar de contener lo antes posible la trasmisión y los problemas que pueda traer el virus”.

De momento todos los casos confirmados y la mayoría de los sospechosos son de hombres que han mantenido relaciones sexuales con otros hombres y se han contagiado así. Joan Caylá, portavoz de la Sociedad Española de Epidemiología, explica que “en este brote todo apunta a que fue muy determinante la fiesta del orgullo gay de entre el 5 y el 15 de mayo en Maspalomas, Gran Canaria. Allí habrían ido entre 30.000 y 80.000 personas de muchos países del mundo. Es una macrofiesta que ha favorecido que el virus pueda haberse dispersado”.

Es importante resaltar que este virus se contagia igual a hombres y mujeres, y que es casualidad que el colectivo afectado sea el de hombres que mantienen relaciones con hombres. Porque la transmisión se ha producido en ese ámbito de macrofiesta, y en una sauna para el mismo público en Madrid. “Pero los primeros casos en mujeres no tardarán, porque un contacto muy estrecho provoca el contagio sea quien sea la persona”, explica Caylá.

Y tranquiliza: “La covid era más transmisible. Esto se contagia no por el aire, sino por gota gruesa: una conversación con un infectado a un metro de distancia podría hacer que nos llegaran gotas y contagiarnos, pero la probabilidad de que tú y yo hablemos con un contagiado es bajísima”. Eso sí, las noticias en los próximos días darán cuenta de un aumento, ya que se ha calculado que cada infectado ha podido tener entre 5 y 10 contactos estrechos. Así que “esto, en definitiva, afectará a unos centenares de personas en todo el mundo pero si se trabajan bien los contactos y éstos tienen precauciones no serán más de unos cientos de casos. El pico será en pocos días y a partir de ahí habrá cada vez menos casos”.

El experto epidemiólogo recomienda que ”aquellos que hayan tenido contacto muy estrecho con personas que puedan tener viruela de mono, que consulten una clínica de infecciones de transmisión sexual, donde serán revisados y revisadas sin ningún tipo de discriminación ni de estigmatización”. Desde el inicio de síntomas (dolor de cabeza, dolor muscular) se puede ser contagioso hasta que desaparecen las lesiones, que tardan entre dos y tres semanas. Ante la sospecha, lo mejor es evitar los contactos estrechos y usar mascarilla.